Los estudiantes de la ULE han intensificado sus protestas en el campus de Vegazana, denunciando el genocidio en Gaza. La Asamblea por Palestina busca que la Universidad de León condene públicamente al Estado de Israel y corte relaciones con el Incibe, debido a su colaboración con empresas israelíes. Las actividades incluyen encierros, acampadas y la recolección de firmas para iniciar una mesa de negociación con el Rectorado en funciones.
Exigencias y acciones realizadas por los estudiantes
Los estudiantes de la Universidad de León han llevado a cabo una serie de acciones en el campus de Vegazana para poner en evidencia lo que consideran un genocidio en Gaza. Primero, iniciaron encierros en la biblioteca central, que luego se transformaron en una acampada en la campa de Biológicas. Estas actividades han atraído a un número creciente de participantes, todos unidos con un objetivo común: exigir justicia y solidaridad con el pueblo palestino.
Para captar la atención de la comunidad universitaria, la Asamblea por Palestina ha organizado también una cafetada y un recital de poemas. Estas iniciativas buscan crear conciencia y promover sus demandas. La próxima semana, los estudiantes comenzarán una mesa de negociación con el Rectorado en funciones, con la esperanza de que la Universidad de León condene abiertamente las acciones del Estado de Israel en Gaza y corte sus relaciones con el Incibe, debido a las colaboraciones que este mantiene con Israel.
Los estudiantes buscan justicia y solidaridad con el pueblo palestino.
Reivindicaciones específicas y próximos pasos
Las principales exigencias de los estudiantes incluyen una condena abierta al genocidio perpetrado por Israel en Gaza y el cese de todas las relaciones con el Incibe. Este último punto se debe a la colaboración entre dicha institución y empresas afines al Estado de Israel. Los estudiantes han dejado claro que estas relaciones son inaceptables y exigen medidas concretas para ponerles fin.
En los próximos días, la Asamblea por Palestina llevará las firmas recogidas al Rectorado en funciones, buscando un compromiso firme antes de la toma de posesión oficial del nuevo equipo rectoral liderado por Nuria González. La comunidad estudiantil sigue movilizada y vigilante, esperando que sus voces sean escuchadas y se tomen medidas que reflejen sus preocupaciones. ¿Responderá la universidad a estas demandas? La próxima semana será crucial para conocer el desenlace de esta situación.
