La noche en el Metropolitano prometía ser especial. Los seguidores del Atlético de Madrid llenaban el estadio con cánticos y banderas, ansiosos por ver a su equipo en acción.
El partido comenzó con intensidad, pero fue en la segunda mitad cuando Antoine Griezmann brilló. Con un impresionante doblete de Griezmann, el Atlético tomó el control del juego y desató la euforia en las gradas.
Nadie esperaba una remontada histórica de tal magnitud, pero el equipo lo logró. Esta victoria no solo suma puntos, sino que representa la cuarta victoria consecutiva y aumenta la emoción en el Metropolitano como nunca antes.
El Sevilla sorprende pero el Atlético responde
En el Metropolitano, el encuentro comenzó con una energía palpable, y el Atlético se adelantó gracias a un gol de De Paul que levantó a la afición de sus asientos. Sin embargo, la reacción del Sevilla no se hizo esperar. Tras una jugada elaborada, el empate de Lukabio silenció momentáneamente al estadio. La intensidad en el campo era evidente, con ambos equipos mostrando un juego dinámico y lleno de acciones de peligro.
El giro inesperado llegó cuando Isaac Romero marcó un golazo desde fuera del área, poniendo al Sevilla por delante en el marcador. El Atlético no se rindió y buscó igualar el partido antes del descanso. En el último minuto de la primera mitad, una jugada polémica terminó en gol, pero fue anulado por VAR, dejando a los colchoneros con frustración. La contienda se mantenía abierta para la segunda parte, manteniendo a los hinchas al filo de sus asientos.
Griezmann y Lino sellan la victoria en el tiempo añadido
La segunda mitad inició con cambios estratégicos, y la entrada de Sorloth en el campo ofreció nuevas opciones al ataque rojiblanco. El Atlético empujaba con todas sus fuerzas, pero la defensa del Sevilla se mantenía firme. Fue en los minutos finales cuando Griezmann se lució con una jugada magistral, asistiendo a Samuel Lino para que marcara el gol definitivo. La afición explotó en júbilo al ver cómo el partido se inclinaba a su favor.
La actuación de Álvaro Fernández en la portería del Sevilla evitó que el marcador fuera más abultado, con paradas impresionantes que mantenían a su equipo con esperanza. Sin embargo, el gol de Samuel Lino en el tiempo añadido selló el resultado. La alegría rojiblanca inundó el estadio al sonar el pitido final, celebrando una remontada que parecía imposible minutos atrás. El Atlético demostró una vez más su espíritu de lucha y capacidad para darle la vuelta a situaciones adversas.
